9 febrero, 2025

Siempre con la Verdad a Tiempo

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Llegan a un acuerdo Comité de Maestros Jubilados e ISSSTE en Tamaulipas

Sostuvieron una junta de trabajo con personal del Comité de Maestros jubilados y Pensionados del ISSSTE en Tamaulipas, dónde llegaron a varios acuerdos.

Por:  José de Jesús Medina

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Después de haber dado a conocer las anomalías de las que eran objeto, maestros jubilados y pensionados del Estado, en las instalaciones del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado, debido a la escasez de medicamentos, y que en fines de semana y horarios nocturnos les negaran la atención en dichos centos hospitalarios.

El líder de los maestros jubilados y pensionados en la entidad, Rodrigo Tavares García, dio a conocer que ha llegado a un acuerdo con el delegado del ISSSTE, tras una serie de negociaciones, que tendrán como objetivo recibir una menor atención médica y evitar las carencias en medicamentos y la falta de empatía del personal médico.

La reunión tuvo lugar en la Delegación del ISSSTE en Tamaulipas ubicada en el nueve Hidalgo en Ciudad Victoria, dónde  luego del diálogo que tuvieron con Raúl Velázquez Guerrero Delegado Estatal y Ernesto Lavín, Subdelegado médico, dónde acordaron los puntos de diálogo a fin de garantizar el servicio de calidad a los maestros.

El líder de los maestros jubilados, expuso que se van a estar monitoreando constantemente los hospitales y unidades médicas en Tamaulipas, para disminuir en la medida de lo posible las irregularidades en el servicio que se les descuenta a los trabajadores de la educación.

Al término de la junta, se acordó que las autoridades del ISSSTE se van a comprometer a satisfacer la demanda de los derechohabientes, quienes están en todo su derecho de manifestarse pacíficamente en busca de mejorar el servicio del centro hospitalario.

Puntualizó Tavares García, que la principal problemática es la falta de medicamento, así como personal médico, ya qué en altas horas de la noche o en fines de semana se les niega la atención a los maestros, por lo que se ven obligados a poner de su bolsa para atenderse en instituciones o nosocomios privados, que cuestan “un ojo de la cara”.