Por Oscar Obregón Sánchez
La Iglesia Católica está lamentando que el pueblo de México, sin excepción de El Mante esté pasando por una situación sumamente difícil ahora que se ha dado – al inicio del año – el famoso gasolinazo, pues éste ha provocado el alza de precios en productos de la canasta básica y, por ende, la inconformidad de muchos ciudadanos sobre el aumento salarial de los legisladores, mientras que el pueblo sufre por aumento en precios de primera necesidad.
Rodolfo Carranza Zaleta, Monseñor de la Iglesia de Guadalupe en Mante resaltó que efectivamente es de lamentar lo que se está viviendo en el país, por una parte porque los legisladores que estuvieron a favor del aumento en el precio de la gasolina debieron de haber velado los intereses del pueblo para su crecimiento y prosperidad.
“Las pasadas administraciones fueron muy astutos en poner el alza de precio de la gasolina poco a poquito, de golpe claro es un duro para la gente, tal vez sea necesario, pero hay que hacer las cosas poco a poco… la gente se asusta, los empresarios, el comercio etc. y es cuando h ay problemas”, comentó.
E n cuanto a los políticos y legisladores o gobiernos que están a favor del alza en el precio de la gasolina, aseguró que es de lamentar porque se supone que ellos están para ayudar y atender las necesidades de la gente, de ayudarle y de echarle la mano para su superación en todos sus aspectos y no para hundirlo o matarlo de hambre que es lo que está pasando con el famoso gasolinazo.
Asimismo, recomendó que los políticos deban de tomar en cuenta a la persona humana y no sólo ver a sus intereses personales y descendencias de familia, pues muchos es lo que están haciendo, acumulando riquezas sin ayudar el bienestar de la gente necesitada y pobre, cosa que se vive en México y que es de lamentar.
“No se trata de aplastar a nadie… somos seres humanos y el rico debe de ayudar al pobre”, resaltó al ser cuestión de que muchos políticos se han hecho ricos o acumulado riquezas ya sea por ser corruptos, mentirosos o bien ser tramposos.
“Esos tipos de políticos que Dios los juzgue… hay gente muy inteligente que ha levantado grandes fortunas y ayudan, pero hay otros que no… dentro de la iglesia hay de todo, buenos y malos y, habrá un juicio fina la última palabra será de Dios”, destacó.
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