Por: Arturo Martínez

Tan solo en el sexto distrito electoral federal de Tamaulipas, con cabecera en El Mante, en el pasado 05 de junio el costo “para alimentación” de los ciudadanos que participaron como funcionarios, un presidente, un secretario y dos escrutadores por casilla, fue de 530 mil pesos, es decir, 250 pesos por persona.

Durante la elección local se ubicaron 530 casillas, cuatro funcionarios en cada una de ellas, sin embargo tan solo en El Mante se contabilizaron 856 votos anulados, muchos de ellos por marcar un recuadro equivocado o salirse del mismo.

El objetivo del dispositivo electrónico de votación, llamado boleta electrónica, está diseñado para realizar la votación, escrutinio y cómputo electrónicamente, agilizando y disminuyendo los errores humanos.

Desde hace cuatro años, el Instituto Nacional Electoral, antes IFE, ha realizado en los 300 distritos del país pruebas piloto de la boleta, pero hasta la fecha no ha sido vinculante.

El INE, no descarta la posibilidad de utilizarla a futuro, sobre todo tomando en cuenta que estamos a un año de un proceso electoral concurrente donde se elegirán por lo menos cinco cargos de elección popular.

El costo aproximado de la boleta electrónica (al menos eso se dijo en el año 2012 previo a la elección presidencial), es de 11 mil pesos cada una de ellas, sin embargo el costo podría reducirse cuando sean producidas en serie.

Lo anterior reduciría de manera significativa los costos que se generan cada proceso electoral en la compra de boletas de papel con dispositivos de seguridad, tintas indelebles, lápices, etc.